Hoy he escuchado una canción que
recordaba a ti
o quizás fue al revés y me pensaste tú a
mí.
Será, quién sabe, que tras esas mil
miradas
se esconde algo más que cien carros
llenos de palabras.
Y eso que empezamos vacuos de sentido
sin saber bien que decirnos
exclamé un: “te deseo” lleno de lujuria
y tú… tú me respondiste que algún día.
Aún recuerdo aquella inoportuna noche
el miedo a aquel tímido reproche
pensé que ya no importaba la opinión de
nadie
pero me helaste cada fibra, hasta el
aire.
Sé que puede que no sea nada cierto
pero aún recuerdo que nos besamos con los
dedos
justo antes de empezar con este juego
de la espuma de tus labios hechos verso.
Llámame loco pero tras ese rastro que
dejas de placer
y esa sonrisa tímida que un día nos vio
nacer
me parece que hay un corazón que late muy
deprisa
esperando a tirarse en picado desde esa
cornisa
que construiste a base de querer en
secreto
y yo que soy adicto te suplico sólo tus
restos.
Y sé que puede que no sea nada cierto
pero aún recuerdo que nos besamos con los
dedos
justo antes de empezar con este juego
de la espuma de tus labios hechos verso.
Por favor confírmame que es verdad
que mi cabeza ha inventado toda esta realidad
que la nuestra es la mentira más bonita
que no somos más que aquella noche
infinita…
Hoy he escuchado una canción que
recordaba a ti
o quizás fue al revés y me pensaste tú a
mí.
Será, quién sabe, que tras esas mil
miradas
se esconde algo más que cien carros
llenos de palabras.
0 comments:
Post a Comment